¡Mucho mejor!

Hola mis preciosidades. Siento no escribir tanto como antes. Lo bueno es que no lo hago porque no tengo tiempo, no por estar deprimida...

El lunes empecé el curso de formación para el nuevo trabajo. Pasé un día malísimo, porque tengo que ir en metro y luego dos autobuses, y luego andar un cuarto de hora hasta la oficina. Vamos, que está donde Cristo perdió el gorro. Hacía muchísimo calor y me daban ganas continuamente de abandonar, como siempre. Me salvó de hacerlo que la coordinadora es majísima y que el trabajo me gustó. Sí, por fin voy a trabajar en algo que me gusta, y además es fácil. Pero como no hay trabajo perfecto, siendo una jornada de 6 horas me obliga a estar fuera 8.

Ahora lo cuento desde la distancia, pero es cierto que el lunes llegué hasta mala a casa. Y tararí, se presentó N., por la tarde. No le abrí la puerta, jaajaj, digo, no lo puedo afrontar ahora. Pues luego bajé a la farmacia y me estaba esperando..

No sé qué hacer con este tío. Me gusta y cuando le veo me alegra un montón. Pero a la vez me pone de los nervios y andamos luego de broncas. En fin. Ya no le veo hasta principio de mes, y mira, mejor¡ Que si no me empacho...

En cuanto a la comida, el peso... casi no como, por la falta de tiempo y el calor, pero sigo pesando lo mismo. Es desesperante. A ver si aprovecho este verano de trabajo para adelgazar muchooo

Espero que estéis bien, como véis, yo contenta aunque cansada. Todo es atreverse.