martes, 31 de marzo de 2009
Tres fueron tres
sábado, 28 de marzo de 2009
Dolorida
Me he dado cuenta de que existe una espantosa pauta relacionada con la regla y la forma de comer (o de no comer) Cuando me falta una semana para que me venga, estoy, bueno, supongo que como todas, con caprichos de dulces y eso. Pero claro, yo que como compulsivamente y ya ni me acuerdo de la última vez que comí de manera sana, eso se traduce en pasarme una semana arrasando lo que pille. Después con la regla se me va el hambre pero aun así estoy enorme.
El momento de más estabilidad mental es justo cuando se acaba la regla, un par de días después. Entonces tomo conciencia de que he ganado, igual un kilo, y empiezo a notar que la ropa me molesta. Decido ayunar y abrazar a Ana. Lo consigo durante unos 20 días, si no hay alguna debacle emocional claro, hasta que me llega otra vez el puto síndrome premenstrual, y vuelta a empezar.
El caso es que este mes, he tenido ataques de pánico (por uno de ellos me bajé del autobús que me llevaba a una entrevista de trabajo) Ese día, el de la entrevista, bueno, al volver en metro realmente creí que me moría, es la sensación de que vas a tener un ataque al corazón.
Y para rematar, he pasado estos días sufriendo una dolorosísima gingivitis. La gingivitis me suele coincidir con la regla o períodos de estrés, y es por usar tanto a Mía. Me dolía tanto que me subió la fiebre antesdeanoche y tuve que ir al dentista de urgencia...
El caso es que ayer fui con mi dentista y me dijo que tengo una muela cariada infectada, de ahí la gingivitis. Pero la muela me la he cargado yo devolviendo...
Estos días, han sido raros en cuanto a la alimentación, en realidad me dolía tanto la boca que casi no podía comer. Y estaba tomando analgésicos, antibióticos y mi medicación habitual, así que cuando el dolor me daba un descanso comía lo que quería comer y punto. Hablando con una princesa, me convenció el finde pasado de no devolver, y la hice caso, pero luego el lunes y el martes no pude evitar atracarme de noche y usar a Mía. Claro, eso agravó la gingivitis.
El caso es que ahora apenas me duele, pero eso sí, comer normal y no moverme apenas ha dado como resultado que mis vaqueros casi no me van, me siento enorme, así que para variar, comienza el ciclo de ayunos.
El problema terrible que tengo ahora es:
- No puedo vomitar. No debo, no debo, porque el dolor que he sentido es insuperable. Si vomito otra vez...
-No tengo motivación. Me he dado cuenta de que.. bueno, en esta epoca del año, justo el lunes, comienza el trabajo ese para el que no fui seleccionada en origen, y que es donde veo al tío que me gusta. Este año no estoy. No tengo trabajo, no voy a clase, no salgo por ahí. Me planteo a veces que si vivo apartada del mundo, si la comida me alivia este dolor tan grande de vivir, pues que ancha es Castilla, comer libremente, a quién le importa que pese 70 ó 50 kilos. Si soy invisible y estoy sola.
Luego me planteo, que si pesara 50 kilos, probablemente podría hacer cosas que no hago ahora. Ejemplo, ir a clases de baile. Ejemplo, quedar con un "amigo" con el que llevo un año hablando por msn, que es super interesante además de estar buenísimo. Y que continuamente me ofrece una visita turística a su cama. Ya sabéis, ni de coña me desnudo ante nadie estando como estoy...
Ya no se trata de engordar o no. La comida, es esencial para mí, es una droga. Llevo tantos años comiendo compulsivamente, vomitando, premíandome o castigándome con comida. En una ocasión dejé a Mía voluntariamente y engordé una barbaridad, porque los atracones no terminaron.
Es terrible, pero lo único que sé hacer es ser una puta bulímica restrictiva, no comer en todo el día y esperar a la noche, comer lo que quiera y vomitarlo. Es lo único. Que no sólo me funciona sino que le da un sentido a mi vida, una sensación de control.
La comida siempre está ahí. Me fallan los trabajos, no consigo ser quien quiero ser. Estoy completamente sola, pero la comida siempre te ofrece un consuelo. La comida es como el dolor, siempre cumple lo que promete.
En uno de los documentales que tenéis en el blog, Falsas ilusiones, una chica con trastornos de alimentación comenta, que le asustaba curarse, porque, quién iba a ser ella sin su trastorno. También sale una médico explicando lo que le cuesta a las enfermas renunciar al trastorno, porque es una manera de no enfrentarse a la vida.
En otro libro que conoceréis por la peli, Trainspotting, el protagonista Mark Renton, heroinómano, cuenta que la ventaja de ser yonki es que todo lo demás deja de importarte. Te da igual que esta tía te haga caso o no, cómo va tu equipo de fútbol, los colegas... explica que cuando estás con la heroína, conseguirla y chutártela es lo único que ocupa tu mente.
Eso me pasa a mí con la comida, y los rituales, de ayuno, purga, pesarse... Puede ocupar tanto mi mente que no veo lo vacía que está mi vida.
Estos días en Madrid ha hecho calor de verdad, 25º. Y me acuerdo ahora de la sensación asfixiante del verano, de la necesidad de ir casi sin ropa para no morir abrasada. Me pongo una camiseta de manga corta, y se ven los brazos gordos, se marca la tripa, salen los michelines. Tragedia. Algo he de hacer para que cuando llegue junio, pese 10 kilos menos.
Ha sido una entrada muy larga. Me ha costado volver a escribir. Invadida por una pereza mortal, sólo quiero dormir, pero leo vuestros blogs aunque no comente. Gracias por los comentarios de mi última entrada.
Quiero ahora dedicar la letra de una canción a una princesa que sufre y que ojalá sonriera todos los días, porque es una persona maravillosa. Espero que sepa el cariño que le tengo y que pienso en ella aunque no me conecte. Para mi brujita, Neva esta canción me recuerda a ti no sé por qué.
Mi soledad, Georges Moustaki
Por haber dormido tan a menudo con mi soledad
Se ha convertido casi en una amiga, una dulce costumbre
No me deja ni un momento, fiel como una sombra
Ella me ha seguido por todas partes, por los cuatro rincones del mundo
No, yo no estoy jamás solo, con mi soledad
Cuando ella se tiende en mi cama, la ocupa toda entera,
Y pasamos largas noches, los dos, frente a frente.
Verdaderamente, no sé hasta donde me seguirá esta cómplice.
Será necesario que me acostumbre o que reaccione.
No, yo no estoy jamás solo, con mi soledad
Por su culpa he visto tanto que he llegado a llorar.
Si alguna vez la rechazo, nunca se rinde
Y aunque a veces prefiera el amor de alguna otra cortesana
Ella será en mi último día, mi última compañera.
No, yo no estoy jamás solo, con mi soledad.
No, yo no estoy jamás solo, con mi soledad.
sábado, 14 de marzo de 2009
Maldita sea
Meme
-Ver Crímenes Imperfectos, programa de la Sexta que emite a las 12:00 h, en mi sillón con mi perrito, con las ventanas abiertas, entrando el sol, con una taza de té negro y un cigarro.
-Encontrar un libro nuevo que me abstraiga y leérmelo en un día.
-Pesarme y ver que he bajado medio kilo en un día jeejje
-Dormir abrazada a mi perrito y notar su respiración en mi barbilla y su tripita caliente
-Quedar con mi hermana, reírnos, tener nuestro propia forma de expresarnos.
-Descubrir, investigar,crear cualquier cosa, este blog, una poesía, ver algo en un periódico...
viernes, 13 de marzo de 2009
¡Luminosa, cómete el pollo!
Bueno, creo que me libré de casi toda la comida, más me vale en todo caso, porque era toda hiper hiper calórica, luego no cené nada, obvio, y me tomé una infusión Bio 3. Pero como siempre que me va a bajar la regla y uso a Mía, me salió un flemón como la cabeza de un niño. A ver si voy al dentista de una santa vez.
jueves, 12 de marzo de 2009
Fasting girl
Para entretener mis horas de ocio desesperante, miro y busco en Internet. Ayer di con un artículo que hace referencia a las fasting girls:
No comer. Ese es el significado literal en latín de la palabra inedia.En la época victoriana,hasta entonces patrimonio de santos medievales, reapareció de un modo inesperado y masivo. El espiritismo, y todo lo paranormal en general, eran la diversión de moda en la Inglaterra victoriana. Aparecidos, duendes, hadas, astrología, muertos parlantes, que parecían haber sido desterrados al mundo de los cuentos por la Ilustración, reaparecieron con más fuerza que nunca en los salones de té de Londres a finales del XIX. La inedia fue uno de los más exitosos en este resurgir de lo oculto. Multitud de niñas y adolescentes inglesas afirmaban no necesitar el menor sustento material para vivir. Eran tantas que incluso existía una palabra para referirse a ellas, las llamaban las fasting girls. Las chicas en ayuno. Eran una da las atracciones mas visitadas en ferias y circos de lo extraño y también eran habituales en teatros de variedades.
El público que observaba a aquellas chicas a las que se les notaban los huesos veía un misterio insondable, una prueba de la existencia de cosas que no comprendemos, un desafío a la razón...
Fueron mujeres que, llevadas por lo que hoy se llamaría anorexia nerviosa, por creencias religiosas extremistas, por ansias de popularidad, por desequilibrios mentales o simplemente (e irónicamente) por la misma hambre para ganar dinero o aportar fama a su pueblo o ciudad, arriesgaron la vida mientras decenas de médicos nunca llegaron a explicarse del todo el por qué ni el cómo de su actitud.
El caso de la joven Sarah Jacob es frecuentemente interpretado como el primero adscribible a la anorexia nerviosa (aunque esto sería muy discutible), en un siglo en el que la corriente romántica empezó a propugnar el ideal de belleza pálido e insano que tan bien retrataron (y publicitaron) los artistas prerrafaelitas.
Sarah tenía diez años cuando empezó a dejar de comer. La niña, procedente de una familia modesta y analfabeta, empezó a quejarse de molestias en el estómago y en la boca hasta que fue encamada por consejo médico .. sólo para empeorar : durante tres meses sufrió convulsiones, ataques epilépticos continuos, parálisis temporales en brazos y piernas y, sobre todo, fue dejando de comer. Cuando el 10 de octubre de 1867 los médicos documentaron que había empezado el ayuno total, llevaba ya varios días comiendo apenas un minúsculo trozo de manzana al día.
Durante los meses siguientes, Sarah sólo probó el agua, y su caso corrió como la pólvora por todo el Reino Unido, haciendo que cientos de especialistas y curiosos la visitasen en su humilde habitación. La joven había dejado de orinar y de excretar a las pocas semaas, y, curiosamente, aunque se mostraba más delgada, no presentaba mal aspecto. Sarah se convirtió en un ejemplo de perseverancia y fortaleza sin igual y su familia empezó a recibir dinero, regalos, flores, libros (Sarah era la única que sabía leer en la casa) y demás presentes que sus padres aceptaron sin dudar. En los últimos meses de su vida, la habitación de Sarah era un cuadro prerrafaelita perfecto : los cronistas eran recibidos ante la niña dulcemente colocada en una cama radiantemente blanca y cubierta de flores.
El caso de Sarah fue tan profundamente estudiado en su tiempo que parece ser que fue real : la niña no comió absolutamente nada durante más de dos años, sin que se le notara físicamente hasta, al menos, mediados de 1869. Ésa fue la época en la que Sarah comenzó a empeorar, hasta su muerte en el mes de diciembre. Fue un escándalo. Al parecer, en los últimos meses de su vida y coincidiendo con el empeoramiento de la niña, ésta había comenzado, por primera vez en todo aquel tiempo, a pedir comida. Sus padres y los médicos que la estudiaban se negaron a dársela, llevados por una mezcla de miedo, de ambición y de deseos de experimentación. Las crónicas, que hasta ese entonces habían tratado el caso casi como si de un fenómeno de feria se tratase, alzaron la voz. ¡Una niña muerta de hambre en el Occidente desarrollado del siglo XIX!. Por coincidencia o por alguna otra razón, la moda romántica que propugnaba el ideal de mujer casi transparente había empezado ya a pasarse de moda en la Inglaterra de la época.
PD. Ni los padres de Sarah ni el personal del hospital fueron juzgados por asesinato.
Otro caso trágico de fasting girl fue el de Leonora Eaton (Nueva Jersey, 1881), considerada como una "persona especial y símbolo de fe" murió tras 45 días sin comer.
martes, 10 de marzo de 2009
Culpa
lunes, 9 de marzo de 2009
400 gramos
Normalmente la gente está más deprimida los lunes, a mí los lunes me encantan. Odio el fin de semana, me siento más sola, más abandonada, me recuerda que no haga nada en todo el día, me hace darme cuenta de que ha pasado otra semana y no he cumplido mis metas (adelgazar, conseguir un trabajo, estudiar) Dios, es demasiada presión. Os juro que a veces me echo una siesta, porque duermo mal por las noches o simplemente para que la tarde pase más rápido, y me despierta la ansiedad, me despierto con taquicardia y con la horrible sensación de que tendría que estar en otro sitio. Odio que me pase eso.
Porque yo estoy medicándome contra la ansiedad y la angustia, desde hace 3 años, tomo Paroxetina (Motiván) un antidepresivo para las crisis de angustia y Alprazolam (Trankimazín) para los ataques de pánico. Además tengo sesiones de psicoterapia.
¿He mejorado? Sí. En febrero de 2006, que fue cuando empecé con la terapia y la medicación, tuve tal crisis de ansiedad una noche, que parecía en serio, la niña de El exorcista. Aún vivía en casa de mi madre, tuvimos que llamar a un médico de urgencias, era de noche, me pinchó Valium, un show... En esa época, unos meses antes, en noviembre, dejé tirada la carrera de Derecho, porque me dio un ataque de pánico en clase, y luego estaba sola en el campus, sola, nadie podía ayudarme, tuve que volver a Madrid por mis medios.. Sólo de escribirlo me angustio.
Por eso cuando el otro día tuve que volver a la Facultad de Derecho a hacer trámites y no me dio una crisis de ansiedad, os juro, que fue un avance, estoy deseando ir a la psiqui y contárselo.
Después mejoré mucho, me refiero con Rosa (la psiqui) y la medicación, un año después conseguí mi primer empleo, dejé de tener crisis, no tenía tantos ataques de hambre, me despegué un poco de mi madre... Después pasó algo que me volvió, si no a la casilla de salida, casi. Ya os lo contaré.. En octubre del año 2007 me fui a vivir sola, fue muy duro, muchos de mis problemas vienen por el apego excesivo a mi madre, pero a la larga me vino bien. Aunque es cierto que tener la libertad de comer como quiera ha sido perjudicial.
Hablando de mi madre y de comida, ayer vino a verme y me trajo un pan súper bueno y pollo asado, que me encanta, resistí comer, pero hoy, creo que mi mente independientemente ha planeado ayunar todo el día, y comerlo esta noche, y purgarme, claro.
Cada día tengo que recurrir menos a Mía, porque, os juro, que la boca la tengo fastidiada, me he estropeado una muela, y me salen flemones muy dolorosos muy a menudo... Pero yo la mayoría de las veces cuando como en "plan mal" y recurro a Mía no es hambre, es por ansiedad o aburrimiento, y mientras eso no se resuelva, Mía seguirá en mi vida.
A veces pienso que debería trabajar jornada completa, aunque odiara el trabajo y me dieran crisis de ansiedad, aunque tuviera que ir medio zombie de trankimazines, porque así estaría alejada de la nevera, y estaria distraída. Ojalá pudiera trabajar y estudiar, mis niñas.
Estoy tan cansada de sentir que fracaso. Hay cosas que no pueden volver atrás (ser bailarina, o estudiar medicina) pero hay otras que sí puedo arreglar.
Ha sido un post muy mal escrito, muy caótico, os lo escribo como me sale del alma. Tengo un problema a veces, que es esconder lo que siento, incluso en mi propio espacio del blog, intento parecer más animada de lo que estoy para que nadie se preocupe y me ocupo más de animar a los demás. Espero no haberos aburrido, tesoros. Me paso por vuestros blogs como siempre. BESOS.
viernes, 6 de marzo de 2009
He bajado dos kilos y medio
miércoles, 4 de marzo de 2009
Adriana Lima, el tabaco y unos vaqueros rotos
Hay un segundo grupo muy especial. Esta formado por personas que no comen lo que les gustaría, y si lo hacen, toman medidas para no engordar. Es un grupo que se preocupa por su salud y por su aspecto físico, y que no cede ante la tentación de la comida. Es sacrificado. Sí. Pero ya que no pueden formar parte de la gente que puede comer libremente, deciden que comen para vivir, no viven para comer. Es un grupo formado por ¡¡¡princesas!!!
Food craving
El food craving' es un estado emocional subjetivo que promueve la búsqueda de alimentos.
Weingarten y Elstón en 1991 encuentran episodios de food craving en un 97% de las chicas y un 69% de los chicos en una población de adolescentes canadienses. Un 32% de las niñas relacionan estos episodios con su ciclo menstrual. En ese y otros trabajos de población, se observa que las mujeres manifiestan más episodios de food craving que los hombres.
Quienes sienten craving por alimentos salados, consumen con frecuencia: maíz frito, sopas, galletas saladas y patatas fritas.
La teoría de la 'deprivación'. Esta teoría afirma que los episodios de food craving están causados por una restricción o limitación de alimentos en la dieta.
Los niveles de NPY aumentan por la mañana y durante las situaciones de estrés. Niveles elevados de NPY se relacionan con un deseo desmedido por los alimentos ricos en hidratos de carbono. El pico en los niveles de galanina es mayor a la noche, y se relaciona con un aumento de la ingesta de alimentos grasos.
Tiene una textura única, un aroma y un sabor que mucha gente encuentra irresistible. Este producto contiene una sustancia química, la feniletilamina (PEA) y grasa, las cuales incrementan los niveles de endorfinas, responsables en gran medida de los estados de euforia. Y también contiene teobromina y cafeína, ambas sustancias estimulantes. Si esto no fuera suficiente, el azúcar del chocolate aumenta los niveles de serotonina produciendo un efecto relajante.
Ayuno de 3 días
lunes, 2 de marzo de 2009
Me cago en los muertos de los kilos
Al cuerpo no hay quien lo entienda. La semana pasada, cuando volví a la lucha, perdí 1kg 100 gr en dos días, simplemente ayunando durante el día, purgándome por la noche y haciendo mi vida habitual de parada ociosa, ergo: tele, paseo al perro, algún recado.
Leí en internet acerca de unas infusiones llamadas bio 3 control de peso, (http://www.bio3.es/index.php) y aunque yo ya estoy servida con todos mis tés, decidí comprarla. Se supone que si tienes problemas con el intestino no debes tomarlas, pero bueno, yo pensé que era una exageración, estuve tomando 1 bolsita cada día y es cierto que funciona.
El lío vino este fin de semana, no sé si me enfrié en el parque al sacar al perro o que el sábado tomé demasiada infu, pero me he pasado todo el domingo en el baño, y nada agradable...
El viernes me fui en ayunas a una entrevista de trabajo al otro lado de Madrid, tuve que coger metro, bus, andar taco, salí a las 11:00 h de casa y volví a las 16:00 h.
Bien, después de este weekend dantesco, de ir, venir, ayunar (por supuesto, con la tripa suelta nadie, ni siquiera yo, tiene ganas de atracones), y visitas al baño, la maldita báscula sigue marcando 72,3 kg
Que alguien me explique, si es mejor no comer nada, no ir al baño, no moverse del sillón y adelgazaré más rápido... Bueno, no me quiero trastornar mucho, molesta porque sufres y te esfuerzas y has perdido 3 días, pero igual, ese kilo y 100 gr era mucho para dos días, y ahora el cuerpo necesita un descansito.
Con algo de suerte me sale el trabajo, es una empresa muy consolidada (no afectada por la crisis) y obviamente además de recibir mi sueldo como buena trabajadora, pasaré 7 horas ocupada, no comeré y quemaré calorías. Cuando trabajo siempre adelgazo.
Ahora me queda estudiar cada día para que la ansiedad desaparezca, para no despertarme como si alguien me aferrara sus manos a la garganta (algún día me he despertado diciendo ¡no quiero¡ )
Si alguien ve que su peso se estanca, ánimo, vamos por buen camino. Y si os compráis las infus, están buenas, funcionan, con la primera tacita notas ya el vientre plano, pero por Dios, haced caso de las instrucciones y no bebáis más que una taza o dos...
PD. El título del post se lo oí decir a un concursante de un reality muy freak de Cuatro que veo los lunes. Me hizo mucha gracia porque los kilos no tienen muertos. Pero como pesan los desgraciados.
domingo, 1 de marzo de 2009
Por la puerta grande
- Obviamente, pesar 55 kilos y quedarme ahí para siempre!
- Terminar la diplomatura de Trabajo Social y hacer Criminología, sí sí, como los del CSI..
- Que mi amor platónico, imposible, inalcanzable, como sea, por Fernando, se materialice. Hasta estoy dispuesta a casarme y aguantar a su madre...
- Para que esto se cumpla, condicion sinecuanum es tener hijos, así que deseo lo mismo que Drew, perderle miedo a la maternidad.
- Tener amigos fieles, buenos, legales, de esos que no he tenido nunca
-Tener buena salud de una vez, me refiero nada de ansiedad ni depresión
- Que mi madre, mi hermana y mi perro jeejje sean felices y sanos
- Puestos a pedir, escribir una novela, o varias, no por ser famosa, sino por saber que realmente tengo ese talento...
Nomino a: Silvana, http://blogdesilvanna.blogspot.com/
Escupiendo mariposas
La vida es bella, no has roto tu dieta/ayuno y no ha empezado el atracón, pero empiezas a sentir esa conocida ansiedad, esa comezón, no es hambre, bueno, quizá sí, quizá llevas 12 horas sin comer porque ayunas, pero ya sabemos, que muchos atracones son por angustia, aburrimiento,etc. Notas ese hormigueo que no se alivia con nada. Pruebas un té que te calme, cuentas hasta 100, das un paseo, bla, bla, es igual, necesitas comer¡¡¡ Mucho, ahora, ya.
OK, arranca, pero hazlo bien. En orden, lo primero es saber que tienes el campo libre. Yo vivo sola en el caso de que no sea así para ti, asegúrate de que dispones de espacio/tiempo personal para tu festín. Después muy importante MIRAR LA HORA, hay que asegurarse de que entre que empezamos a comer y terminamos de purgarnos pasa 1 hora.
Es el tiempo del que disponemos para que no se quede nada dentro, el cuerpo es muy astuto y enseguida empieza a asumir las calorías... Un aviso, si cuando te purgues notas "sabor a vómito" es que has tardado demasiado, la comida no te debe saber a nada.
DURANTE LA COMIDA...
Bien, procura no estar muy ansioso, yo procuro prepararme por ej., un sandwich mixto a la plancha que me vuelve loca y mientras se hace voy picando otras cosas como baguette con paté, etc., y siempre vigilando el reloj.
Es importante comer un alimento con un color llamativo, como fritos, comida MARCADORA, lo primero que comerás, lo último que echarás, así sabrás que está fuera todo.
Del infierno al paraíso y vuelta a empezar
Años más tarde, en 2007, pesaba 83 kg, y fue cuando me dije a mí misma, ¡frena!
Siempre tuve problemas con la comida, me considero comedora compulsiva, un pariente muy cercano sufrió anorexia, en fin... tenía todas las papeletas. Los atracones y las purgas comenzaron a los 16 años, más como una forma de eliminar tensiones que otra cosa.
Después pasé años sin purgarme, de ahí que me volviera obesa, puesto que era incapaz de comer ordenadamente... Incluso cuando hacía una dieta e iba al gimnasio adelgazaba terriblemente despacio. Sufría depresión,ansiedad, casi no salía de casa, supongo que mi metabolismo se bloqueó...
En 2007 encontré mi primer empleo, me enamoré de un hombre (con el que nunca estuve) y conseguí bajar algunos kilos, que obviamente luego recuperé... El año pasado le volví a ver. Y conseguí bajar hasta los 65,9 kg, nada mal teniendo en cuenta que mi meta son 55,5.
Pero luego me quedé en paro, llegó el verano, que es un etapa que siempre he detestado del año, junto con la Navidad, y bueno, ahora mismo peso unos horrendos 72,3 kg.
Encima este año no voy a ver a Fernando (mon amour) Después de pasar por la depresión de saber que va a estar lejos de mí un año, he decidido que no es razón para dejar de luchar: NO¡
Porque un año pasa rápido, altezas, y cuando le vuelva a ver la próxima primavera seré un ángel perfecto digno de su amor
Delgada, ligera, hecha de aire...
Bienvenidas a mi universo
trastornos de la alimentación, aunque nunca animaré a nadie a introducirse en ese mundo.
Si quieres seguir leyendo... bienvenid@